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La especialista en salud reproductiva y directora de Ginecólogas Chile se refirió al futuro en esta materia ad portas de lo que podrian ser las directrises de un nuevo proceso constituyente.
Tras el plebiscito del 4 de septiembre, en el que el rechazo se impuso con un aplastante 62% de las adhesiones, tanto el Gobierno como el poder legislativo han mostrado -casi transversalmente- una voluntad por continuar con un proceso constituyente que logre acuerdos y convenza a la población.
La propuesta de Nueva Constitución era considerada la “más progresista del mundo”, según recabaron medios internacionales como The Guardian y BBC. En ella se proponía consagrar derechos sociales, incluyendo propuestas ciudadanas a través de las Iniciativas Populares de Norma. Una de ellas fue“Será Ley”, que sumó 38 mil firmas, y cuyos ejes conformaron el artículo 61 del borrador, en el capítulo II que incluía Derechos Fundamentales y Garantías.
Andrea von Hoveling, directora de Ginecólogas Chile, miebro activo de la Sociedad de Ginecología Infantil y Adolecente y exdelegada en Chile para el consejo Iberoamericano de salud reproductiva y sexual, destaca el contenido del artículo que consideraba acceso a la educación sexual integral y a la anticoncepción, como también a partos seguros y libres de violencia.
La instalación de estos derechos no lograron convencer, e incluso se prestaron para interpretaciones erróneas y fake news. Respecto a esto, la Dra. von Hoveling afirma que “hay un tema de fondo: los derechos sexuales y reproductivos en Chile no se ven como Derechos Humanos sino como temas ideológicos, pese a la opinión contraria de múltiples organismos internacionales”.
Según Ciper, una de las razones por las que las personas rechazaron la propuesta constitucional, era precisamente por una supuesta imposición del aborto libre. Sobre esto, von Hoveling, quien también participó de la comisión de derechos fundamentales, afirma que “efectivamente se refería también a la interrupción voluntaria del embarazo, pero simplemente implicaba que se abría el camino para legislar al respecto”
Sin embargo, la experta mira con esperanza el nuevo proceso constituyente y asegura que “los derechos sexuales ya están arriba de la mesa, y no hay vuelta atrás”. Según von Hoveling “si estas garantías son plasmadas en la constitución seremos consecuentes como nación a tratados internacionales que ya hemos suscrito”, como la Convención de Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (Cedaw) de 1979.