Un total de 46 personas muertas y otras 16 en estado grave fueron halladas este lunes al interior de un camión en las inmediaciones de la base aérea Lackland, en el suroeste de la ciudad estadounidense de San Antonio, ubicada a 155 kilómetros de la frontera de México, en el Estado de Texas.
Según informó el diario The Texas Tribune, el caso quedó al descubierto después que un trabajador diera aviso a la policía tras escuchar gritos y llamados de auxilio.
El alcalde de San Antonio, Ron Nirenberg calificó el hecho como una verdadera «tragedia humana», mientras que el jefe de de la policía de la ciudad, William McManus, dijo que se trata del incidente de contrabando de personas más letal de las últimas décadas.
Al llegar al lugar, los efectivos encontraron algunos cadáveres tirados en distintas cuadras, lo que hace presumir que varios de ellos consiguieron saltar del vehículo. Se trata de un camión con un trailer cerrado que si bien tenía un sistema de refrigeración, al parecer no estaba en uso. Es un detalle importante, considerando que por estos días en esa zona del país las temperaturas máximas han alcanzado los 40 grados.
Los policías también descubrieron que los cadáveres y las pocas personas que aún se encontraban con vida, habían sido rociadas con un condimento «para bistec», una suerte de truco de los contrabandistas para ocultar el olor de las personas que estaban transportando.
Hasta el momento hay tres personas detenidas, aunque no está claro que estén relacionadas con la tragedia. Un portavoz del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EE. UU. dijo que Investigaciones de Seguridad Nacional está liderando una investigación criminal con el apoyo de la policía de San Antonio.
Se cree que el conductor huyó del lugar poco antes de que llegara la policía al lugar. En tanto, los 16 sobrevivientes fueron trasladados a distintos centros asistenciales de la ciudad.
El contrabando transfronterizo y la trata de personas han sido problemas de larga data a lo largo de la frontera entre Estados Unidos y México.