El partido estaba empatado a un gol. Lucas Assadi a los 10 minutos y Santiago Montiel a los 27 habían anotado para cada equipo. Así se fueron al descanso, pero al regresar…
Hinchas de la Universidad de Chile comenzaron a lanzar objetos hacia la tribuna de la bandeja inferior. Se quejaban que los del Rojo, desde que estaban 0 a 1, desde la «Garganta» (tribuna en la esquina del estadio Libertadores de América), les estaban lanzando piedras.
El segundo tiempo comenzó con 6 minutos de retraso. Christofer Toseli reemplazaba en el arco a Gabriel Castellón. El arbitro uruguayo, Gustavo Tejera, reinició el partido, pero del segundo tiempo se alcanzaron a jugar dos minutos. Cuarenta minutos más tarde, un hincha azul caída desde seis metros al vacío, huyendo de la turba de Independiente que inundó la tribuna alta.
Antes, los 3 mil 500 chilenos habían salido del estadio, pero una decena no lo quizo hacer, pues en el exterior había «un callejón oscuro», entre policías y civiles que agredían con palos y puños a los que se marchaban. Algunos fueron desnudados, mientras huían razgándoles las ropas.
El presidente de Independiente, Néstor Grindetti, se tomó el micrófono y anunció que viajará a Asunción «a reclamar los puntos, porque los hinchas de Universidad de Chile fueron los causantes de la tragedia».
La Conmebol, presta a sacar comunicados deslindando responsabilidades, señalaba que «la Dirección de Competiciones y Operaciones de la CONMEBOL, en función a la falta de garantías de seguridad por parte del club local y de las autoridades locales de seguridad, que garanticen la continuidad del partido entre Independiente (ARG) y Universidad de Chile (CHI) por la Octavos de Final de la CONMEBOL Sudamericana 2025, dicho encuentro queda cancelado»
La «U» comunicaba en redes sociales que hubo 19 heridos, de diversa consideración atendidos en el Hospital Fiorito de Avellaneda, Hospital Wilde y Hospital Presidente Perón de Sarandí. Dos fueron pasados a quirófano, uno de ellos está grave, identificado como Gonzalo Alfaro.
A su vez, el Presidente Gabriel Boric, señalaba en X: «Dada la gravedad de lo sucedido ayer en Argentina con el inaceptable linchamiento de chilenos en el estadio de Independiente, he instruido al Ministro del Interior Álvaro Elizalde que viaje a Buenos Aires para, junto con el Embajador, acompañar personalmente a los heridos y revisar la situación de los detenidos. La violencia no tiene ninguna justificación, de ningún lado, y vamos a proteger los derechos de nuestros ciudadanos sin perjuicio de las responsabilidades que pueda establecer la justicia».
La nómina de heridos dada por la «U»
Gonzalo Alfaro, estado muy grave por caída en altura. Riesgo vital, en cirugía.
Jaime Mora, cirugía por fractura Pablo Mora, politraumatismo
Brayan Martínez, apuñalado Ignacio Castro, sutura en la cabeza
Diego Trujillo, politraumatismo
Sebastián Aliste, politraumatismo
Fernando Ortiz, politraumatismo de cráneo
Hian Abreu, politraumatismo
Carlos Mesa, politraumatismo
Román Silva, politraumatismo
Víctor Neira, politraumatismo
Andrés Villalobos, traumatismo de craneo (en observación)
Diego Montero, apuñalado en tórax superior y traumatismo de cráneo
Renato Urbina, traumatismo de cráneo
Joaquín Vaina, politraumatismo
Rubén Torres, politraumatismo
José Acuiada, politraumatismo
Patricio Valenzuela, politraumatismo