Banco Central: «La economía está en un mejor pie»

El Informe de Estabilidad Financiera del segundo semestre elaborado por el Banco Central destaca que sigue avanzando la resolución de los desequilibrios macro con la reducción de la inflación y la tasa de interés a corto plazo.

El documento sostiene, sin embargo, que «los riesgos del escenario macrofinanciero externo han aumentado respecto del Informe anterior. Las tasas de interés de corto y largo plazo se han elevado significativamente, respondiendo a la reaceleración de la economía e inflación en EE. UU. y las preocupaciones por la situación fiscal de ese país. Sumado a un contexto geopolítico complejo, las perspectivas para la economía global siguen siendo una fuente relevante de riesgos. De intensificarse un escenario de tasas de interés de largo plazo más alta, y un ajuste monetario más prolongado en las economías desarrolladas, las condiciones financieras para emergentes se estrecharán aún más. Pese a que no se han registrado nuevas tensiones en los sistemas financieros de las economías desarrolladas, se mantienen las vulnerabilidades en algunos segmentos».

La economía en Chile

En lo interno, el reporte del Central afirma que «la resolución de los desequilibrios macro sigue avanzando, lo que pone en un mejor pie a la economía chilena ante el deterioro del escenario global. A la reducción de la inflación y de las tasas de interés de corto plazo, se suma una caída en el endeudamiento de las empresas y una normalización de los indicadores financieros de los usuarios de crédito».

«En todo caso», agrega, «se observa heterogeneidad entre los distintos actores de la economía. La actividad crediticia se siguió contrayendo, coherente con el estado del ciclo, mientras que el costo del crédito comenzó a caer en plazos en los que tiene mayor incidencia la política monetaria menos restrictiva. La banca local cuenta con liquidez, provisiones y capital suficiente para enfrentar escenarios de tensión severos. No obstante, al igual que el resto de los agentes de la economía, es importante que continúe fortaleciendo sus capacidades para enfrentar nuevos eventos adversos».

«También es necesario que siga preparándose para los próximos desafíos, como el vencimiento de las políticas de apoyo establecidas durante la pandemia (FCIC), el aumento del riesgo de crédito y la convergencia a Basilea III. Un deterioro de las condiciones financieras externas representa el principal riesgo para usuarios y oferentes de crédito locales. Ello, reafirma la necesidad de continuar adoptando medidas orientadas a fortalecer la resiliencia y capacidad del sistema financiero de amortiguar eventos adversos», concluye el Banco Central.