- Un caza F-22 abatió el aparato del tamaño de tres autobuses que cayó en el mar frente a las costas de Carolina del Sur. Mientras el Pentágono aseguró que recorrió varias zonas sensibles del país, el gigante asiático dijo que se trataba de una aeronave civil no tripulada. Y lejos de poner paños fríos a la crisis diplomática, no descartó hacer uso de su «derecho de dar más respuestas de ser necesario».
Un avión de combate de Estados Unidos derribó el globo chino que sobrevolaba territorio norteamericano a 18 kilómetros de altura y tenía el tamaño de tres autobuses, de acuerdo con un comunicado emitido por el secretario de Defensa. Poco más temprano, el presidente Joe Biden había declarado a los medios que «se encargarían” del aparato, que Washington califica como «espía”.
Fox News, Reuters y CNN aseguran, citando testigos presenciales o fuentes oficiales, que la operación se llevó a cabo el sábado en la costa este de Estados Unidos, en Carolina del Sur, poco después de que se informara del cierre de temporal de tres aeropuertos, en lo que la Administración Federal de Aviación calificó como un «esfuerzo de seguridad nacional”. Autoridades costeras también llamaron a despejar zonas marinas.
El Pentágono aclaró en un comunicado que la acción se produjo sobre aguas territoriales estadounidenses y que fue realizada como respuesta a la «inaceptable violación» china. «La acción deliberada, y ajustada a la ley, realizada hoy demuestra que el presidente Biden y su equipo de seguridad nacional siempre pondrán la seguridad de los estadounidenses en primer lugar, mientras responden de manera efectiva a la inaceptable violación de nuestra soberanía por parte de la República Popular de China», dice el secretario de Defensa, Lloyd Austin, en un comunicado.
«Dirigible civil”
La acción armada tuvo lugar sobre el Océano Atlántico y los militares ahora participan en una operación de rescate de los restos del globo, calificado «de vigilancia» por Defensa. Las autoridades estadounidenses aseguraron que el aparato recorrió distintas zonas sensibles del país y desató un nuevo choque diplomático entre Washington y Pekín, al punto que el viaje a China que tenía previsto el secretario de Estado, Antony Blinken, fue cancelado.
Un testigo citado por CNN señaló que varios aviones sobrevolaron la zona y «un misil o un artefacto similar» impactó contra el globo. Posteriormente se confirmó que un F-22 abatió al aparato chino, que tras una pequeña explosión comenzó a caer. Las autoridades estadounidenses esperan recuperar tantos restos del globo como sea posible antes de que se hundan en el mar. De esta forma podrán determinar la naturaleza real del aparato y sus funciones.
El Pentágono anunció el jueves que estaba siguiendo los movimientos de un «globo espía» chino que sobrevolaba el estado de Montana (noreste de EE.UU.), donde se encuentra uno de los tres campos de silos de misiles nucleares existentes en territorio estadounidense. China admitió que el globo le pertenecía, aunque aseguró que «es un dirigible civil utilizado con fines de investigación, principalmente meteorológicos».
Tras el derribo, el gobierno de Pekín protestó y acusó a Washington de ejecutar una «práctica claramente desproporcionada y una seria violación internacional».
«China expresa su fuerte descontento y protesta contra el uso de la fuerza por parte de Estados Unidos para atacar una aeronave civil no tripulada», dijo el ministro de Exteriores chino en un comunicado, y añadió que se reservará «el derecho de dar más respuestas de ser necesario».
Con información de DW.com