El artista británico estadounidense deleitó la noche del jueves a sus fans chilenos en el concierto que ofreció en el Teatro Caupolicán, en el centro de Santiago, y que sufrió varios contratiempos debido a los desórdenes que se produjeron en el exterior del recinto.
De hecho, el intérprete de éxitos como “Speed”, “Eyes Without a Face” y «Dancing with myself» debió interrumpir por cerca de media hora su show debido a gases lacrimógenos y polvo de extintores en suspensión que llegaron hasta el escenario.
No fue lo único, porque también se produjeron algunos incidentes dentro del mismo teatro cuando decenas de personas que se encontraban en las galerías se pasaron hacia el sector de la platea.
Los organizadores llamaron a la calma a los asistentes. «Tenemos una pequeña situación que se está solucionando en la entrada, para que el artista pueda respirar un poco, por el tema del olor de las lacrimógenas. Así que, por favor, mantener la calma. No se retiren porque afuera está todo con policías, así que tranquilos, tranquilos. Les pedimos unos minutos, por favor”.
Mientras tanto, el propio artista relataba a través de Instagram lo que estaba pasando. “algunos punks intentaron colarse en el concierto… La policía antidisturbios les lanzó gas lacrimógeno, se filtró en el auditorio, así que tuvimos que suspender el concierto… ¡Pero volveremos al escenario pronto!”, escribió en la red social.
Para fortuna de los fanáticos, el espectáculo se reanudó sin contratiempos y antes de la última canción Billy Idol se refirió a lo ocurrido. «“fue una noche increíble: hubo gas, policía…”, expresó.