Rafael Urriola U. Área de salud y bienestar APROB
Fonasa ha venido ofreciendo una futura Modalidad de Cobertura Complementaria (MCC). Pocos saben cómo funciona exactamente este mecanismo pese a que se ha anunciado que comenzará en julio de este año y que concierne a cerca de 17 millones de personas afiliadas a Fonasa.
El Fonasa publicó un mecanismo de aranceles para esta modalidad que, en todo caso, no explicita los dos temas centrales que interesan a la gente: ¿Qué patologías cubrirá el seguro MCC? Y ¿cuál será el valor de la prima adicional que deberán pagar las personas?
Además, hay numerosas preguntas técnicas que pueden hacerse adicionalmente y que seguramente los especialistas de Fonasa las están examinando. Por ejemplo, ¿si este seguro es voluntario cómo podrán evaluar las aseguradoras el costo de la prima? Puesto que las aseguradoras son empresas con fines de lucro, probablemente, lo harán suponiendo que solo se afiliarán las personas con más riesgos y así el valor de la prima puede ser muy alto.
En el documento del Diario oficial del 14.9.2024 que APRUEBA ARANCEL DE LA MODALIDAD DE COBERTURA COMPLEMENTARIA DEL FONDO NACIONAL DE SALUD (MCC) se establecen valores para las prestaciones. Para una prestación cualquiera se fija el arancel Fonasa y se determina un valor final que cobrarán las empresas privadas en convenio (en exposiciones de personeros de Fonasa se asegura que los valores finales están concordados con las clínicas). Entonces la MCC consiste en encontrar un sistema que acorte la diferencia que paga el usuario entre la cobertura Fonasa y el valor final, conocido como copago.
De este modo, el usuario Fonasa podrá pagar una prima que le cubra, por ejemplo, el 70% de lo que actualmente pagaría como copago por atenderse en una clínica privada. Esta modalidad es similar a los seguros o pagos complementarios que las Isapres cobran a sus asegurados para mejorar los planes. Recuérdese que los afiliados a Isapres pagan, en promedio, alrededor de 60% adicional a su cotización obligatoria con este objetivo.
Además, en los últimos años han proliferado los seguros complementarios de salud ofrecidos por aseguradoras y por las propias clínicas que han ampliado su “área de negocios” en este ámbito. Estos seguros suenan atractivos pero suelen adolecer de regulaciones básicas que protejan a los afiliados.
De hecho, las Isapres tenían más de 50.000 planes que era la forma en que se “aislaba” a los usuarios costosos para aumentarles de manera especial las primas. ¿Cómo el MCC va a evitar esta manera de proceder de los seguros privados?
Fonasa y el sector público de salud -con todas sus deficiencias y errores- universaliza su atención sin discriminaciones (claro está que se ubica muy lejos de satisfacer las necesidades completas de salud de su población). El MCC al ser una institucionalidad pública ¿no estará rompiendo con el carácter universal y no discriminatorio del seguro público? Cabe preguntarse si no habrá afiliados a Fonasa que no podrán tomar el nuevo seguro y que alegarán incluso constitucionalmente de discriminación en un asunto público.
Quedan muchas preguntas sin respuesta hasta ahora, habrá que esperar que Fonasa explicite el funcionamiento de la MCC.