Fiscalía pide a Venezuela detener a dos sujetos por crimen de Ojeda y caso fue «político»

El fiscal Héctor Barros, quien investiga el crimen del opositor venezolano Ronald Ojeda, dijo que las tesis de auto secuestro y de secuestro extorsivo están descartadas, y que están pidiendo a Venezuela la detención de dos sujetos que se encuentran en ese país y que huyeron de Chile tras la acción el 21 de febrero.

Barros dijo que «hasta el momento hemos establecido que esto no fue un autosecuestro, no fue un secuestro extorsivo, que esto fue organizado por el el Tren de Aragua con una organización extranjera, en contexto de crimen organizado, donde el perfil concreto que tiene la víctima nos lleva a concluir que ninguna de las primeras hipótesis en que la víctima hubiera estado en movimientos ilícitos o que el Tren de Aragua lo hubiera secuestrado para efectos de cobrar algún rescate, están absolutamente descartadas, por lo tanto, la única línea que nos queda esa».

El persecutor, prosiguió, señalando que «hemos hecho un requerimiento de asistencia penal internacional a Venezuela, a efectos que nos puedan ayudar con la detención de los dos ciudadanos venezolanos que están actualmente en ese país».

Sobre esta nueva tesis, el fiscal dijo que «si ustedes analizan lo que ha pasado desde el mes de enero a la fecha en cuanto a los secuestros extorsivos y secuestros con homicidio del Tren de Aragua, se han dado cuenta que después del allanamiento que se hizo a las casas de cautiverio en Rinconada de Maipú, tuvimos cero secuestro con homicidio en ese contexto extorsivo».

En el caso del ex oficial del ejército venezolano, precisó que «es absolutamente distinto al resto, porque acá jamás se pidió rescate, jamás se intentó pedir un rescate, fue una víctima que fue asesinada a las pocas horas de haber sido secuestrado».

Luego ahondó en su explicación: «El Tren de Aragua siempre ha dejado los cuerpos tirados en distintos lugares y eso se ha dado cuenta en Rinconada de Maipú, donde encontramos una serie de cuerpos que habían sido dejados y que son de personas venezolanas. Pero en este caso, se tomaron el trabajo de enterrarlo a 1,40 metro de profundidad, dejarlo en una maleta una vez que estaba fallecido, ponerle un saco de cal, y ponerle una capa de cemento».

Para el fiscal Barros  «este es un delito transnacional que se organizó en Venezuela, no he dicho que es un tema político, no he dicho quién lo organizó, porque eso es parte de la investigación, y en eso estamos trabajando».

En este caso solo se encuentra detenida una persona, por la cobertura que dio al movimiento con un automóvil en el sector de Independencia donde vivía Ronald Ojeda.