Opinión: El buen juicio de Matthei, como dirigiendo el tránsito

Por Héctor Martínez Díaz, periodista

 

La alcaldesa Evelyn Matthei, criticó a la Defensoría Penal Pública y señaló que es “Una vergüenza”. “El sistema de Defensoría Penal Pública, tiene por objeto que las personas acusadas tengan un buen juicio. Pero acá, la Defensoría ha entendido mal su papel y se ha convertido en una forma en que tratan de sacar, por cualquier forma, por cualquier tinterillada a los peores presos y dejarlos libres”, agregó.

Uno podría esperar mayor rigurosidad y seriedad en las declaraciones de quien aspira a la primera magistratura del país. Porque no creo que la alcaldesa pretenda que, en lo que para ella es un “buen juicio”, existan defensores públicos de oficio, mudos, que en las audiencias estén de palo o, simplemente, asistiendo con la cabeza a todo lo que el ente percutor aspire.

De ocurrir aquello, como en ocasiones pudiese suceder una visión túnel de los agentes persecutores, personas inocentes pueden caer tras las rejas, en tal caso, de seguro sería la misma Alcaldesa Matthei, quien exigiría mayor dedicación a los defensores.

Ahora bien, leguleyadas y tinterilladas puede haber en el alegato de un sobregirado alegato de un actor del sistema procesal penal, otra cosa es sobredimensionar el poder de convicción de los argumentos de quien haga uso de tales artimañas, menospreciando el trabajo ya sea de defensores o fiscales y, por cierto, de jueces, porque son precisamente estos últimos, quienes deciden si una persona queda libre o presa.

Si para la alcaldesa Matthei la Defensoría es “una vergüenza”, alguien pudiera decir que es a ella quien debiera darle vergüenza expresar tamaños juicios, pero está archi comprobado que vale la pena ruborizarse un poco, si con un discurso simple, básico, populista y demagógico, si bien se puede perder un par de votos, pero ganar más de mil.