«El Golpe de Estado de 1973 fue un quiebre institucional que rompió los lazos de convivencia y marcó a generaciones de chilenos y chilenas, pero también inspiró a muchos a luchar por la justicia y la libertad», señaló en una declaración el Secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Guterres.
Al cumplirse 50 años, «hoy, rendimos homenaje a las víctimas de ese período oscuro y a todas las personas que han trabajado incansablemente para sanar heridas y construir una sociedad más inclusiva y justa».
Luego el Secretario General de las Naciones Unidas dijo que «el Golpe y la muerte de Salvador Allende, siete meses antes de la Revolución de los Claveles, me conmovieron profundamente, al igual que las historias de chilenos perseguidos que conocí como refugiados».
«Este aniversario coincide con los 75 años de la Declaración Universal de los Derechos Humanos. La Declaración nos debe servir de guía para escuchar a todas las víctimas y sus seres cercanos, reconocer su dolor, y contribuir a su derecho a la verdad, a la justicia, a la reparación y a la no repetición», aseguró.
Sobre el al anuncio del plan de búsqueda de personas desaparecidas, expresó que » refleja la necesidad de continuar fortaleciendo la memoria histórica, como forma para unir a la sociedad y enfrentar tareas pendientes y problemas comunes con una mirada de futuro».
Auguró que «la sólida democracia chilena de hoy nos permite tener la esperanza de que la humanidad, unida en su diversidad, puede resolver cualquier desafío global. En este aniversario, celebremos el compromiso chileno con la democracia y los derechos humanos y reafirmemos nuestra dedicación para construir un mundo más justo, solidario y pacífico».