Cuarenta y ocho horas después de grabar y entregar copia del audio a medios de comunicación, el diputado de Renovación Nacional por la Araucanía, Miguel Mellado se autoinculpó y, a través de una declaración, relató cómo se gestó el delito.
Dijo haber llegado tarde a la reunión del martes donde se pidió no grabar, por lo cual desconocía la prohibición, tras lo cual, ante la petición de los medios, decidió compartir el audio registrado de unos 10 minutos de la parte final, donde estaban las conclusiones de la cita.
«Me di cuenta de lo importante que era dar conocimiento de estos puntos a mi región y que no quedaran en el olvido estos compromisos, por lo que lo compartí de buena fe», sostuvo.
Agregó que «en ese momento en que se me solicitó el audio, consideré, que no contenía nada de información distinta a las declaraciones públicas de los asistentes a la salida de la reunión, ni tampoco frases que denostaran a algunos de los presentes».
Justificó su accionar señalando que creyó «que no era una reunión de carácter secreto» y pidió disculpas al Presidente, a los ministros y parlamentarios.
La acción de grabar audio o videos de una reunión privada está penada por la Ley, con condenas que van desde 3 años y un día a cinco años, de acuerdo al artículo 161-A del Código Penal.
Miguel Mellado preside la Comisión de Economía e integra las comisiones de Hacienda y de Control de Sistema de Inteligencia del Estado.