«No vaya a mi funeral»

Erick Pohlhammer fue despedido ayer martes luego de padecer las secuelas de un accidente cerebro vascular. A los 68 años nos dejó su carisma, su espíritu crítico, su buen humor y su talento como profesor de castellano, desde donde cultivó las letras.

Su versatilidad y su elocuencia lo hizo conocido en la televisión y en la literatura. Antes fue futbolista en su alma mater, en la Universidad Católica, donde destacó como capitán en las series de menores y juveniles. También fue boxeador, rugbista y nadador.

Era un retratista de la cotidianeidad, porque vivió con pasión la vida. Hoy, al despedirlo, reproducimos versos que escribió para los que fueran a su funeral.

Erick Pohlhammer Boccardo (1954-2023)

No vaya a mi funeral con cara de funeral
Vaya a mi funeral como se va a una fiesta
Vaya a mi funeral junto a una gran orquesta
Vaya a mi funeral como se va a un carnaval

Lleve a mi funeral sillas de playa
Vaya a mi funeral a tomar el sol
No olvide que vino al mundo de vacaciones
No me diga amigo mío que ya se olvidó

La vida no muere nunca, la vida no tiene fin
Vaya a leer poemas breves de Enrique Lihn
Siéntese en una tumba a contemplar las nubes
Las nubes que no contempla desde que se puso gil

Vaya a mi funeral a reírse de sus celos
Que son los frutos podridos de la posesión
Vaya a pensar en los universos paralelos
Vaya a pegarse un placentero viajecito astral

No vaya a mi funeral con cara de poto
Vaya a mi funeral con cara de pato
Vaya a mi funeral a fumarse a un pito
Con una puta simpática a conversar de amor