¿Por qué Nuevo Pudahuel no permite la llegada de los buses RED?

En enero de este año el Ministerio de Transportes inauguró el servicio 555 hasta el aeropuerto de Santiago, al cual se puede acceder con el pago de la tarifa normal de la Tarjeta BIP. Pero el concesionario no deja que las máquinas blanquirojas lleguen hasta las terminales nacional e internacional. Los buses solo se acercan hasta el límite de la concesión y los pasajeros deben descender de las máquinas y subir a otras que, aunque son un servicio gratuito, los acercan hasta ambos terminales.

El aeropuerto de Santiago,  que no contaba con transporte público, movilizó sobre 3.5 millones de pasajeros en 2022, más los amigos, familiares y los operadores de franquicias, servicios y todas aquellas acciones necesarias para mantener los aviones y equipamiento aéreo listos y disponibles para la realización de servicios. Solo servicios especiales, por cierto más oneroso que el que normalmente se utiliza para movilizarse en grandes ciudades.

Si bien el 21 de abril del año 2015, el aeropuerto Arturo Merino Benítez fue adjudicado a la empresa Nuevo Pudahuel, formado por Groupe ADP (45%) y Astaldi Conseccioni (15%) y VINCI Airport (40%), el objeto de esta empresa era la de aumentar la capacidad del año 2014, de 16 millones de pasajeros a 30 millones en 2020 y dichos objetivos se cumplieron, pandemia por medio, considerando que el mercado objetivo señalado en sus pronósticos era que contaría con 45 millones de usuarios en dicha fecha.

La decisión del ministerio de Transportes para asignar servicios de transporte público hacia el aeropuerto era un deseo de muchos años, el tope a estas decisiones fueron las referidas a la necesidad que el adjudicatario de lo servicios pudiese disponer de mayores ingresos, vía la licitación de espacios y servicios al interior del aeropuerto.
El 14 de enero el ministro Juan Carlos Muñoz tomó la decisión de implementar este tipo de servicios, más allá de los tropiezos y dudas sobre esta opción. Así las autoridades chilenas dieron, finalmente, por inaugurado un servicio regular de pasajeros, vinculado a la actual línea urbana de transporte llamada RED.

Los problemas generados por esta decisión gubernamental complicaron a las empresas adjudicatarias de los servicios hacia y desde el aeropuerto, se enfrentaron al hecho que los nuevos servicios 555 asignados a Metbus, comenzaron a circular mediante una red establecida, pero que queda en el borde del perímetro del terminal. Por tanto, para acceder a las plataformas nacional e internacional, los pasajeros deben llegar afuera de la concesión y luego esperar un bus de transbordo, para acercarse a los andenes nacional o internacional según sea el caso. Esto es un problema que podría ser subsanado, permitiendo que los buses de l sistema RED puedan también llegar con los pasajeros a las salidas de los terminales nacional e internacional.

La guerra por silenciar este servicio, o bien minimizarlo, ha sido una constante desde que el ministro Muñoz tomó la decisión de autorizar a la empresa Metbus, que une o genera continuidad desde la estación de Metro Pajaritos (Línea 1), con la terminal aérea. Este servicio se realiza cada 10 minutos en un tiempo de viaje estimado de 20 minutos. Son ocho paradas, especialmente en el sector denominado ENEA, tanto de ida como de retorno. De regreso al centro de la ciudad el servicio también tiene detención en el metro Barrancas (línea 5), antes de regresar al metro Pajaritos.

«Los problemas e indiferencia de las autoridades del aeropuerto, solo son una reacción en favor de las empresas que licitaron junto a ellos, en desmedro del servicio propuesto por la autoridad de transporte de Chile», señala un ingeniero que trabaja en el sistema, mientras los usuarios de menores ingresos deben cambiar de bus. Esto significa mayor tiempo para pasajeros y trabajadores, y un costo innecesario para Nuevo Pudahuel.