El dinero en el deporte

Miguel Ángel San Martín. desde Madrid.

 

En mi columna del viernes pasado hablé de la Política y el Deporte. Y comenté brevemente aspectos del fútbol que podrían (y deberían) ser adoptados por los políticos y sus organizaciones. Hoy voy a hablar de un hecho del cual poco se habla y que se refiere a los dineros que mueven en torno al deporte, teniendo como ejemplo lo que ganan los deportistas destacados.

Hace un par de días, el Real Madrid presentó a su afición a su nueva estrella, el francés Kylian Mbappé. Unos 85 mil espectadores llenaron el estadio Santiago Bernabeu, y el escenario estuvo a la altura del espectáculo.

¿Cuáles son las razones de su contrato? Kylian Mbappé Lottin, nació en Paris hace 25 años y debutó en la selección de su país con 19 años. Ha obtenido el Oro en el Mundial de Rusia en el 2018 y la Plata en el de Qatar, en el 2022. Ganó la Liga de las Naciones en Italia en el 2021 y el Oro en el Europeo Sub 19 de Alemania, en el 2016. Antes de llegar al Real Madrid, jugó en el Mónaco y en el Paris Saint Germain. Ha sido el máximo goleador de la Ligue 1 durante cinco temporadas consecutivas, siendo reconocido en cuatro oportunidades como el Mejor Jugador de la Primera División de su país.

Esos méritos lo han traído al Real Madrid, club que no debió pagar traspaso, puesto que llegó en calidad de “libre” desde el Paris Saint Germain. Sin embargo, el club español tendrá que desembolsar, según algunas informaciones publicadas en la prensa española, unos 100 millones de euros durante los cinco años como prima por su contrato, además de un sueldo fijo anual de alrededor de 30 millones de euros por temporada.

Sin duda, las cantidades que se manejan son desorbitadas. ¿Es tanto el dinero que genera el fútbol? Estos traspasos, contratos y primas que reciben los futbolistas de élite han crecido de acuerdo con la importancia que se le da ahora al deporte del balón en el concierto internacional. ¿De dónde sale tanto dinero? Además de las entradas que se pagan en los estadios, en una primera instancia, de las transmisiones de televisión. Son cantidades enormes las que pagan los canales por la exclusiva de las transmisiones. Y es que es tal el nivel de la audiencia de los partidos de fútbol que las agencias de publicidad aprovechan de contratar anuncios de productos de empresas transnacionales. Sin duda que dicha publicidad es muy efectiva, ya que los productos anunciados consiguen vender muchísimo.

En resumen, todos ganan. Las organizaciones del fútbol mundial responsables de regular los eventos y cobrar las entradas. Los clubes por su participación y por la venta de camisetas. (Un dato: por la publicidad que llevan en dichas camisetas, Adidas le pagó 120 millones de euros por temporada al Real Madrid, y Emirates le pagó 70 millones más). Y hay que sumar las gorras, bufandas, insignias, etc. Los canales de televisión también ganan, las agencias de publicidad, los empresarios que se anuncian…

En fin ¿Y quiénes pagan todo eso?  ¿De dónde sale todo ese dineral???  De nuestros bolsillos, de los bolsillos de los aficionados. Porque pagamos por ver la tele, pagamos por comprar camisetas, insignias, recuerdos de los clubes. Pagamos cuando compramos los artículos publicitados y cuando adquirimos lo que usan los jugadores, relojes, camisas, zapatillas, automóviles, etc.

Como conclusión, el mundo del deporte se ha transformado en un gran negocio, en un importante negocio. Hoy hemos hablado sólo del fútbol, pero imagínense lo que mueve el básquetbol, el automovilismo, el beisbol, el tenis, el ciclismo…En general, muchos deportes se encuentran en un sitial preferente en el mundo de las finanzas. Y son muchos los que se aprovechan de aquello y lo utilizan para manipularnos, para adormecernos, para alejarnos de los problemas que nos aquejan. Lo están transformando como una venda que nos ponen en los ojos para llevarnos por el camino que sólo a ellos les conviene.