A minutos del mediodía, Isabel Allende Bussi tomó la palabra y con lágrimas en los ojos y voz entrecortada, recordó a sus padres en el frontis del Palacio de La Moneda.
A las 11.52 minutos se rindió un minuto de silencio y tras el emotivo acto de recogimiento, fue presentada como sobreviviente del bombardeo.
«Con mi hermana, la Tati, estuvimos acompañando al Presidente, hasta que él nos ordenó abandonar el Palacio, y nos dijo, vayan para que cuenten lo que acá pasó», relató la senadora socialista. «La Tati tenía 7 meses de embarazo y fue esa mañana a estar al lado de nuestro padre. Salvador nos dio un abrazo y nunca más lo volví a ver», recordó.
Junto con este emotivo relato, hizo un homenaje a su madre, Hortensia Bussi, quien salió al exilio «a México, que nos abrió las puertas. Acá hago un reconocimiento en la persona de su Presidente, Andrés Manuel López Obrador». También reconoció a Cuba, donde llegó parte de su familia.
«Mi madre se encargó de mantener vivo el legado y la memoria del Presidente Allende. Ella tenía una convicción que solo podría superar con creces sus propias limitaciones físicas, sacando esa voluntad extraordinaria para denunciar los atropellos a los derechos humanos en Chile y convocar a los países para apoyar a Chile, para recuperar la democracia, para mantener vivo el legado de mi padre, pero también unir al fragmentado exilio chileno”, concluyó.