Economía de emergencia

Un tercio han aumentado los campamentos el último año, según la ONG TECHO, que reportó un total de 1.290 en Chile. Esto suma a 113 mil 887 familias que viven en precarias condiciones en las distintas regiones del país.

En los últimos 12 meses la región del Biobío tiene el mayor crecimiento, sumando 198, contra los 122 campamentos que registraba hace un año, seguida por Valparaíso que pasó de 225 a 280, región que sigue encabezando este triste récor.

La causa estructural de este fenómeno es la mala distribución económica de los ingresos, que Chile no quiere entender y así no tiene cómo salir de esta endemia. ¿Por qué 40 mil familias decidieron irse a vivir a un campamento el último año? Porque los arriendos son cada vez más caros y antes de gastarse 400 mil pesos mensuales deben contraer sus gastos. El arriendo base equivale al sueldo mínimo que reciben cada mes esas personas, que primero necesitan comer. Aparte, la canasta familiar básica aumentó un 24% en 12 meses, según el indicador del Ministerio de Desarrollo Social. Entonces, la situación es todavía más dramática. Una familia de 4 personas necesita 577 mil pesos para considerarse fuera de la línea de pobreza.

Chile requiere un programa económico de emergencia, para lo cual es urgente sentarse a conversar entre todos los actores y dejar de lado la pequeñez. De partida, los que tienen más deben poner más. Nos comparamos con la OCDE y estamos lejos del nivel que tenían los países desarrollados cuando el PIB de ellos era como el nuestro hoy. Pero ese poner más es para todos, también para los súper ricos y también para los que ganan hoy más de 4 millones de pesos.

Necesitamos un plan de infraestructura que mueva el país. En 10 años hay que duplicar las carreteras principales, modernizar puertos y aeropuertos. La infraestructura hospitalaria, las escuelas deben cambiar en diseño y en currículum, pero para ello hay que sentarse a conversar y sacar en 90 días el plan.

Un requisito urgente es que haya más diversificación de oferta en la economía. Gran responsabilidad tiene la concentración, que es paso previo para la colusión. Chilecompra debe modernizarse e impedir renovar licitaciones a empresas que han participado (al menos 5 años) en las mismas ofertas que se adjudican por la plataforma Mercado Público. Es necesario que haya más oferentes y que tengan acceso a garantías bancarias, requisito indispensable para participar.

Para que esto sea posible se necesita una tregua política que, por una vez en la vida, deje a los actores de frente a la gente. Que sean capaces de dejar mirarse el ombligo, que abandonen el negocio pequeño y se pongan del lado de los que sufren. Las 630 mil familias sin casa, 130 mil que sobreviven en campamentos. ¿Les parece justo?

Tenemos un Presidente que aprende rápido, que no lo veo en la pelea chica, sino que –como dice-, vamos lento porque vamos lejos. Esa frase atribuida al mexicano Emiliano Zapata y reflotada por el Gabriel Boric, habla de la sabiduría que se requiere para gobernar, porque las opciones son quedarse en la poltrona o activarse y cambiar el estado de las cosas. Todos queremos cambios y que sean justos. La gente no quiere regalos, solo una justa retribución por su esfuerzo. De eso se trata.

Acerca de Aland Tapia San Cristóbal 14 Articles
Ex Seremi de Economía, Región de Valparaíso.