Cuando menos se lo espera, un jugador del equipo mete la pelota en el arco propio. Eso se llama autogol. Hay veces que el mismo portero mete el balón en su valla, algo que en política sucede más a menudo que lo que uno pensaría.
Dejemos fuera el cambio de agenda por los imponderables del clima y sus efectos con los cortes de luz o el asesinato de policías el 27 de abril. Hablemos de las chambonadas de embajadores, de ministros, de alcaldes o de nombramientos que duran 2 días en el cargo.
A estos gafes se les llama errores no forzados, para cambiar de deporte y pasamos del fútbol al tenis. El último es patético: Cuando el Presidente había marcado la agenda con la crisis de Venezuela, apareció la presidenta de los socialistas reclamando falta de liderazgo de Gabriel Boric en materia de delincuencia. Subidos por el chorro, saltaron parlamentarios de todo signo y alcaldes, incluida la pintanina Pizarro. A las quejas por la falta se seguridad en La Pintana, intentó aclarar sus dichos, lo que no consiguió. En esa comuna este año se han cometido 17 asesinatos, uno más que el año pasado a la fecha, pero su estruendosa alocución sirvió a los medios de derecha para amplificar la supuesta falta de liderazgo que moros y cristianos ahora reclaman. Sólo el partido del Presidente, el Frente Amplio, dejó en claro que no comparte los dichos de la socialista Paulina Vodánovic.
A propósito de liderazgo, el Presidente realizó esta semana su cuarta visita a la región de la Araucanía, siendo recibido en todos los lugares con afecto por las comunidades, sin que hubiese ningún temor a visitar la zona, que ha bajado notablemente el número de atentados desde el año 2022.
Y a todo esto, dicho sea de paso, en Rancagua, en el asalto de las oficinas de Brinks apareció un proyectil disparado por la misma arma que se percutó el 15 de marzo del año 2022 durante la visita a la zona de Temucuicui, en la Araucanía, por la ex ministra del Interior Izkia Siches.
Algo huele mal, ¿estaremos frente a un nuevo caso Catrillanca? Tal vez, pero no deja de llamar la atención que un arma aparezca a 600 kilómetros, 2 años después, en manos de delincuentes comunes, salvo que ese día de marzo del 2022 no fueran delincuentes comunes los que dispararon a la comitiva de la ex ministra y tampoco lo hayan sido hace una semana en Rancagua.
Hay que recordar que esa mañana del lunes 15, apenas cuatro días después de asumir el Gobierno, Siches decidió ir a Temucuicui sin presencia de carabineros, salvo una escolta con vestimenta de civil. Fue advertida por una joven oficial de la policía que tenía a cargo la custodia de la ex ministra. Nadie más sabía de esa visita relámpago, pero se filtró y hubo disparos, de la misma arma que fue percutada hace una semana en el asalto al Brinks.
Entonces se dijo que fue un autogol del gobierno recién inaugurado. Tal vez. Lo que está por averiguarse es quién lo hizo, cómo se enteró y qué hacía en ese lugar.