El colombiano Wilmar Roldán entró en los anuarios del fútbol de saqueos cometidos contra el fútbol chileno. Siempre nos quejamos cuando perdemos por fallos referiles, y es lógico que así sea, pero de tanto en tanto aparecen actuaciones de árbitros que son escandalosas, por decir lo menos.
Es lo que sucedió con Roldán el sábado por la noche en Orlando, Estados Unidos, cuando Chile jugaba contra Canadá por definir cuál de las selecciones accedería a cuartos de final de la Copa América. El juez tuvo dos actuaciones erradas, ambos contra Chile, una a los 4 minutos y otra a los 26.
La primera, un codazo en el rostro de un chileno y la otra una expulsión. En ambas Wilmar Roldán estuvo apoyado por los jueces del VAR.
Barreto y Arppi Filho
El uruguayo Ramón Barreto fue uno de los regalones de la Conmebol en la década del 70 y dirigió finales mundiales y de la Copa Libertadores. Una de ellas, el partido de vuelta entre Independiente de Avellaneda y Unión Española, en 1975. Los chilenos habían ganado 1-0 en la idea en el Estadio Nacional.
En el regreso igualaban a un gol cuando en el entretiempo, camino al camarín, desde la tribuna cayó un proyectil que impactó en el réferi charrúa. Éste dio por terminado el partido, pero los dirigentes de los diablos rojos trasandinos lo hicieron cambiar de opinión en una visita al camarín de la terna uruguaya.
De regreso al campo, en un ambiente hostil, los chilenos perdieron 3-1 y hubo un tercer partido de desempate, en Asunción, el que perdieron 2-0
Antes de Roldán y Barreto, el fútbol chileno conoció el saqueo del brasileño Romaulado Arppi Filho, quien arbitró la vuelta de Colo Colo con Independiente de Avellaneda, en 1973. Los chilenos habían empatado 1-1 en Buenos Aires y en el Estadio Nacional vencían con gol de Carlos Caszely, el cual fue anulado por el juez, aduciendo una posición fuera de juego que jamás existió.
En el tercer partido de desempate, el paraguayo José Romel, expulsó a Leonel «Chuflinga» Herrera, dejando al cacique en inferioridad numérica y yendo al alargue. Los argentinos vencieron 2-1. Romel, se cuenta, nunca volvió a dirigir y se afincó en Punta del Este, donde adquirió una propiedad.
Roldán y su historial con Chile
En su reclamo a la Conmebol, la Federación Chilena de Fútbol pidió que el colombiano nunca más dirija un partido de la selección nacional, y puso como ejemplo que en 9 encuentros Chile sólo ha ganado uno, y en varios de ellos ha terminado con polémica.
No fue así la final de la Copa América 2015, jugada en Santiago, donde Roldán tuvo un correcto desempeño. Claro que esta vez Sergio Jadue, entonces presidente del fútbol chileno, pidió para la final que no hubieran uruguayos, paraguayos ni brasileños, según confesó un alto directivo de la Federación: «Sergio no quería que nos arbitraran los del Atlántico y Nicolás Leoz aceptó».
Esta vez el colombiano, debido a sus yerros con equipos chilenos (en mayo arbitró Cerro Porteño-Colo Colo y sancionó con amarilla una plancha que dejó un mes fuera de las canchas al defensa Maximiliano Falcón), lo sentencian. En toda Sudamérica lo tildan de venial, abyecto, pusilánime con los poderosos. Algo debe haber.