El oficialismo se ve complicado en la reelección del gobernador Rodrigo Mundaca en la V Región de Valparaíso, pero el fraccionamiento y espíritu de fronda que prima entre Chile Vamos y el Partido Republicano de competir a muerte entre ellos le brinda un aire y la posibilidad de un triunfo en un balotaje que parece inevitable.
La Encuesta Regional Signos de la Región de Valparaíso de esta quincena trae un conjunto de resultados que se deben mirar con atención sobre lo que parece será la contienda más compleja en el test electoral de octubre en la Región, esto es la elección de gobernador regional. Los otros dos test, Valparaíso y Viña del Mar, que no vienen medidos en esta encuesta, empiezan a despejarse con la renuncia de Jorge Sharp de ir a la reelección de alcalde por Valparaíso anunciada el viernes de la semana pasada.
En la encuesta, los porcentajes agregados de manera simple no son favorables para el oficialismo y parecen favorables para la oposición. No obstante, lo cual, y pese a que los resultados de la medición indican además una tendencia al cambio político del electorado, la oposición se enfrasca en una controversia entre Chile Vamos y Republicanos por la supremacía del sector, desaprovechando esa ventaja. Más aún, pese a tener al menos un par de candidatos posicionados con capacidad de vencer a Rodrigo Mundaca, tal como lo deja entrever la encuesta en una eventual segunda vuelta entre este y Manuel Millones.
Para el oficialismo el problema parece radicar en la imposibilidad de usar la gestión del presidente Boric como un instrumento de poder electoral pues su aprobación muestra tendencia al deterioro, aunque finalmente le servirá para ordenar a los socialistas y apoyar al actual gobernador. El PS es un usufructuario fuerte del gobierno y pocos piensan que institucionalmente pueda desafiar la integridad política del sector apoyando a Viñambres por sobre Mundaca.
Para la oposición en cambio, el problema es doctrinario y de disputa de poder entre Chile Vamos y el Partido Republicano con vistas a la pugna presidencial y la primacía electoral dentro del sector, y no los problemas urgentes de la región. Eso hace que esten desaprovechando la ventaja que les otorga la Encuesta pese a tener uno o dos nombres muy competitivos.
La baja aprobación de Boric
La aprobación regional a la gestión del presidente Boric alcanzó solo al 30,7% y la desaprobación a un 52,8%, algo que en el promedio país y en un trazo temporal de dos o tres meses es mucho mayor y con tendencia marcada a aumentar. A su vez, la evaluación del gobernador Rodrigo Mundaca marca un 32% de Muy bien (6,5%) y Bien (25,5%); un 32,2% dice más o menos; y un 35,6% dice que mal (20,3%) o muy mal (15,3%). Es decir, tiene una marca no muy alta de valoración, pero es un competidor fuerte.
La oposición que aparece fraccionada en dos grupos fuertes Chile Vamos y el Partido Republicano, tiene también incidencia electoral de grupos menores que hoy aparecen como oposición, y que, si bien no disputan liderazgo, resultan importantes para la suma de primera vuelta y el eventual balotaje. Sobre todo, por el trasvasije de sus votos hacia los candidatos seleccionados para segunda vuelta.
Ante la pregunta si el próximo domingo hubiera elecciones para Gobernador a quién votaría los encuestados respondieron: 28,3% por Rodrigo Mundaca (independiente izquierda); un 14,1% por Manuel Millones (independiente de derecha); un13,4% por Francesco Venezian (Republicano); un 10,6% por Luis Pardo (RN); un 8,6% por Mauricio Viñambres (PS) y un 5,3% por María José Hoffman (UDI). Las dudas entre dos o más candidatos es de un 12,2% y quienes no conocen a los candidatos 7,5%.
El balotaje que se viene
En ese contexto se hace necesario un examen de segunda vuelta. La Encuesta Signos trae 4 escenarios que dan los siguientes resultados:
Una segunda vuelta entre Rodrigo Mundaca y Manuel Millones, gana Millones con un 41,9% contra el 37,3% de Mundaca. Un 20,8% dice No sabe.
Una segunda vuelta entre Rodrigo Mundaca y Francesco Venezian, gana Mundaca con un 42,8% contra el 35,7% de Venezian. Un 21,5% dice No sabe.
Una segunda vuelta entre Rodrigo Mundaca y Luis Pardo, gana Mundaca con 40,9%, contra el 40,1% de Luis Pardo, es decir un virtual empate. Un 20% dice no Sabe.
Una segunda vuelta entre Rodrigo Mundaca y María Jose Hoffmann, gana Mundaca con el 41,2%, contra el 30,7% de Hoffman. Un 28,1% Dice No Sabe.
En solo uno de los cuatro escenarios pierde Mundaca frente a Manuel Millones, y baja su techo electoral al 37% desde un promedio de 40% + que presenta en los otros tres.
Eso lo muestra como un candidato de fuerte ascendencia electoral y que bien podría recuperarse dado el porcentaje de quienes se mantienen indecisos.
Con esos resultados es crucial la adhesión y el trasvasije de las opciones presidenciales de los electores a la elección de gobernador. La encuesta trae un interesante cuadro en que cruza los datos de opciones presidenciales con la competición para gobernador,
De los que dicen votar por Evelyn Matthei: Un 12,3% se vaciarían a Rodrigo Mundaca; 8,6% a Francisco Venezian; 18,1% a Luis Pardo, un 24,8% a Manuel Millones, 8,3% a María José Hoffman; un 5,2% a Mauricio Viñambres y un 22,7% No sabe.
De los que dicen votar por José Antonio Kast: Un 3,3% se vacía a Rodrigo Mundaca ; 39,5% a Francisco Venezian; 26,1% a Luis Pardo; 14,6% a Manuel Millones; 14,6% a M.J. Hoffman; un 4,2% a Mauricio Viñambres y 12,3% No sabe.
De los que dicen votar por Carolina Tohá: Un 56,2% se vacia a Rodrigo Mundaca; un 3,2% a Luis Pardo; un 2,5% a Manuel Millones; un 29,4% a Mauricio Viñambres y un 8,7% No sabe.
De los que dicen votar por Franco Parisi: Un 8,2% se vacía a Rodrigo Mundaca; un 2,6% a Francisco Venezian; un 3,9% a Luis Pardo; un 33,7% a Manuel Millones; un 8,7% a M.J. Hoffman; un 5,2% a Mauricio Viñambres; y 43,7% No sabe.
Todo indica entonces que será la inclinación de centro político que mayoritariamente presenta el país y la menor tasa de rechazo de los candidatos a gobernador lo que determinaría en gran medida el resultado final de la elección. A lo que naturalmente debería sumarse los atributos de los candidatos y su identificación real con los problemas regionales, que son básicamente de seguridad, empleo, terminar con el comercio ambulante y mejorar el sistema de salud y vivienda de la región.
Lo que no puede descartarse, dado el fuerte rol centralista de la política chilena es que el oficialismo termine sólidamente unido por su participación en el gobierno, y que la oposición se enrede en maniobras y cálculos simples alejados de la realidad y pierda la perspectiva de poder. Ya José Antonio Kast lo experimentó en carne propia con Gabriel Boric, y si la estrategia de Republicanos es ser mayoría, bien pueden ganarla pero perder el poder, lo que es igual a nada o la paradoja del triunfo moral en política.
Lo mismo ocurre con Chile Vamos que teniendo en su sector a Manuel Millones quien es muy transversal y le ganaría a Mundaca no lo apoya, y levanta la imprevista candidatura de María José Hoffman, de muy muy poca adhesión regional. Maniobra política incomprensible.