Ciclistas aprenden a conocer «puntos ciegos» en buses del transporte público

Desde el asiento del conductor de un bus, algunos de los más de 200 ciclistas que llegaron hasta la esquina de José Pedro Alessandri y Avenida Irarrázaval experimentaron en primera persona lo que ve y lo que no ve un conductor de bus al conducir, para así entender la importancia que tienen los puntos ciegos de este vehículo.

El intercambio de roles entre quienes se desplazan por la ciudad en una bicicleta y los choferes que deben enfrentarse a diario a vías compartidas con ciclistas, automovilistas y peatones, fue parte de una actividad que, en la antesala del Día Nacional Sin Auto que se celebra el viernes 29 de septiembre, busca acercar a dos de los principales actores de la movilidad sustentable y lograr entre ellos una convivencia vial más segura, consciente y empática.

“Permanentemente, a través del programa Compartir para Convivir, que creamos junto a Buses Vule, estamos buscando instancias para que los ciclistas, que son cada vez más en nuestra ciudad, tomen los resguardos necesarios y comprendan las complejidades a las que se enfrenta un conductor de bus cuando, por ejemplo, debe virar en una de las tantas esquinas de sus recorridos”, explicó Amarilis Horta directora ejecutiva de la ONG Bicicultura.

A lo anterior Francisco Dosque, gerente de Logística de Buses Vule agregó que “si bien hemos incorporado e invertido en tecnología para que nuestros buses sean más seguros y los conductores tengan más herramientas para visibilizar los puntos ciegos de las máquinas, una parte importante de lograr que las calles sean más seguras para todos, tiene que ver con el autocuidado y con que los distintos actores conozcan la realidad del otro. A eso apuntamos con estas instancias colaborativas entre ciclistas y conductores de buses, que nos parecen fundamentales”.

Es así como con la presencia de autoridades del gobierno central, regional y del municipio de Ñuñoa, tuvo lugar la “Gran Fotografía Puntos Ciegos”, realizada desde gran altura y utilizando también en paralelo un dron, actividad que permitió demostrar a los ciclistas participantes que en los ángulos muertos o puntos ciegos de un bus se pueden ocultar de la visión del conductor casi un centenar de personas en bicicleta.

«Los más débiles en el eslabón de la movilidad, son los peatones y los ciclistas. Para eso tenemos que cambiar la cultura, pero también tenemos que subir las exigencias normativas y tecnológicas. Debemos tener buses con la tecnología adecuada para suplir los puntos ciegos y hoy día eso es posible para todos los buses que circulan por Santiago», afirmó el gobernador de Santiago, Claudio Orrego.

En esta misma línea, el subsecretario de Transportes, Jorge Daza, destacó que el trabajo conjunto entre la sociedad civil organizada, empresas y el Estado permite avanzar en la meta nacional de reducir las muertes provocadas por siniestros de tránsito: “ése es nuestro compromiso como Ministerio de Transportes y es la visión cero a la que Chile adscribe a nivel internacional: no más muertes en el tránsito, y por eso que apoyamos activamente iniciativas como ‘Compartir para convivir’ porque es el trabajo conjunto el que nos permitirá avanzar”.

Por su parte, junto con comprometer los esfuerzos del municipio para la educación vial, la alcaldesa de Ñuñoa, Emilia Ríos afirmó que “por sus características, esta comuna tiene un número importante de ciclistas y en esa línea nos parece fundamental impulsar instancias de colaboración entre todos quienes podemos contribuir a tener calles más seguras, lo que va de la mano además con el interés de descongestionar la capital y también contribuir a una mayor conciencia medioambiental.”

Paola Tapia, directora DTPM-MTT, explicó que “en la administración actual, el Directorio de Transporte Público Metropolitano ha priorizado la promoción de la convivencia vial entre los distintos modos que comparten el espacio público. Entre las acciones desarrolladas están una mesa de trabajo permanente conformada por actores de la sociedad civil, la academia y el directorio de DTPM, para aplicar medidas tan importantes como los dispositivos y la señalización de puntos ciegos. Adicionalmente, ofrecemos un team educativo para colegios, que entrega información sobre el transporte público y la convivencia vial, promoviendo el respeto, la importancia del pago, entre otras medidas que seguiremos reforzando”.

Karina Muñoz, secretaria ejecutiva de la Conaset destacó que actividades como esta, “facilitan el avance hacia una movilidad más segura, con una mejor convivencia vial que privilegie el transporte público y las formas menos contaminantes de moverse, como la bicicleta. Desde la Conaset en el MTT, estamos impulsando un enfoque de sistema seguro en que la infraestructura, la fiscalización y las normativas apoyen y fomenten conductas individuales más responsables y armónicas para una mejor calidad de vida para todas y todos, pero necesitamos que todos nos comprometamos. Por eso que iniciar esta Semana de la Movilidad que terminará con el Día Nacional Sin Auto, con esta dinámica que nace desde la sociedad civil organizada a través de Bicicultura y que es apoyada por Buses Vule, combinando educación y difusión, es una demostración de que la única forma de avanzar es trabajando en conjunto el Estado, la sociedad civil y las empresas”.